jueves, 3 de mayo de 2012

"Confianza en el futuro"

Tecleo en google "confianza en el futuro". Me sale un anuncio patrocinado de una vidente y su consulta de tarot. También me he enterado de que algunos afortunados hacen cursos llamados tal que "Los caminos hacia la felicidad". Y resulta que en el apartado imágenes aparece la ubicua Esperanza Aguirre con un cartel de propaganda bajo el lema "confianza en el futuro".

¿Será que tenemos la doña y yo la misma idea sobre la confianza? Yo buscaba soluciones a mi desazón, pero mucho me temo que esta señora acaba de desintegrar mi último átomo de... pues eso, de esperanza (que la debe de haber acaparado toda su nombre propio).

Pero tiene que haber vida más allá de la espe. Sigo con mi búsqueda de planetas exteriores. A ver, Zapatero también aparece declarando en algún tiempo pasado su fe en el futuro, y efectivamente ZP da el perfil de extraterrestre. Pero, Google del alma, no es esto lo que ando buscando. Tú que eres el arma del futuro, actualízate un poco. No te me quedes obsoleto, que el mundo no espera a los tardíos. (Te diría que tengas confianza en el futuro, pero me parece un poco fuera de lugar).

Anda, vaya, aquí aparece la frasecita en un blog de psicología. Consejitos sabios, a buen seguro. Echemos un vistazo. Umm, un resumen: si la vida te va mal, acuérdate de cuando te iba bien y te sentías capaz. Pero bueno, que eso es el pasado. ¿Qué hay del futuro? Que te relajes y dejes que la vida te dé sorpresas, recomienda la bitácora sobre "psicología para ser feliz". Paso, hay sorpresas que me recuerdan a Gila: sí, murió, pero... ¿ y lo que nos reímos?

Sospechosamente empieza a aparecer la consabida expresión de forma recurrente en entradas del 2011. Mira tú, el año pasado, anda qué. Pues resulta que el futuro ya está aquí, en el año presente, y seguimos a la espera de la confianza.

De igual manera, la frase "confianza en el futuro" se asocia en la mayoría de los casos a nombres de políticos, bancos y países. Perú parece tener confianza en su progreso, y Argentina también, puesto que ha expropiado no sé que empresa española. Esto comienza a escamarme ligeramente...

Resulta que el Papa también tiene mucha confianza en el porvenir de la humanidad. El Papa está muy lejos, pero un poco más cerca tenemos a Rajoy y al Rey, que dice que ha vuelto para quedarse. Se han juntado ambos líderes como quien queda para echar la ouija y nos han traslado el mensaje ultraterrenal de que la solución pasa por que los españoles tengamos confianza en el futuro. Pero esto me suena un poco tautológico, ¿no? O sea, que para tener confianza en el futuro es necesario... ¿tener confianza en el futuro? Muy bien, pero yo necesitaría una razón con un poquito más de peso.

Tampoco pido tanto, solo una pista, una pequeña indicación, una revelación remota que me ilumine y me indique a mí y a los futuros seis millones de parados a quién o qué encomendarnos. México por lo visto también ha perdido la confianza en el futuro. Bueno, eso no me resuelve nada. No, no me consuela. Y encima ya no pienso ir a México ni aunque me dieran una cosa de esas que antes se llamaban becas o intercambios de trabajo.

Supongo que lo mismo están pensando muchos extranjeros ahora sobre nuestro país: nada de ir a España, que parece que está la cosa muy mala. En las escuelas no caben, y en cambio los hospitales están vacíos, que las camas se venden a precios prohibitivos. ¿Sería una solución utilizar los hospitales caídos en desgracia para acoger a los alumnos enjaulados? Rajoy, le echo creatividad e imaginación a la crisis, que tenemos que ser emprendedores y buscar alternativas. Lo que no sé muy bien es si la idea es ponerse a buscar un nicho por aquí (un nicho de empleo, no seáis malpensados, que aún no está cerrada la búsqueda), o si eso ya vamos a Alemania, que allí nos dan una escoba y para algo valdremos.

Y mira, justo leo que las empresas alemanas sí que tienen confianza en el futuro. ¿Será una señal? Jope, que ya me voy por la página ocho de google y esto es todo lo que he encontrado. Me doy de plazo hasta la página diez, que por mucha necesidad que haya de respuestas y certezas, tampoco es cosa de perder el tiempo por caminos errados. Dos páginas más: voy a prestar atención a la letra pequeña.

Con mil ojos, no se me escape la clave del misterio. La vidente insiste con el tarot. Y... ¡eureka! En el sector avícola hay confianza en el futuro (eso sí, la noticia habla sobre Argentina, parece que están en racha estos muchachos). En todo caso, tengo que decir que yo siempre he tenido mucha confianza en las gallinas y sus posibilidades. Alimento fresco y de calidad asegurado. Al menos por huevos no va a quedar.

Estoy en la página diez: ¡mi última oportunidad del día! La religión católica considera pecado querer apropiarse del futuro. Muchos dirigentes del mundo parece que no hacen mucho caso. ¿Quién se ha llevado el futuro y nuestra confianza en él? Que lo traigan de vuelta, que es de todos, si el capitalismo y la falta de leyes no muestran lo contrario. (Bueno, vale, puede que ya lo hayan dejado claro, pero yo no quiero darme por enterada, ¡que todavía me quedan unas pocas entradas por consultar!)

Anda, una página con un nombre raro, así como espiritual, y tiene una mariposa. Me gustan las mariposas. No sé qué tendrán que decirme las mariposas sobre el futuro, pero lo cierto es que embellecen el presente. Tic tac, tic tac. Dadme un poco de tiempo que tengo que leerlo detenidamente. Sí, ya sé que estamos ansiosos, pero por eso mismo hay que actuar con calma. Es el momento de la sangre fría. Un poco de paciencia, que seguimos en el tiempo presente.

Primera decepción: que dice la página espiritual... ¡que el futuro no existe! Ya, ya, muy bonito, pero el casero es un poquito más terrenal, y creo que ya tiene planeado pasarme la cuenta del mes que viene. Siguiente idea: el karma. Si haces bien, recibirás bien, y si eres malo, pues te irá mal. ¡Pero esto qué es! Eso sería antes, en la gran tradición hindú, pero en los tiempos modernos la verdad cósmica ha cambiado: roba y manga, y vivirás en la abundancia; sé honesto y escrupuloso, y te hundirás en el pozo.

Y cuando hablo de futuro tampoco estoy refiriéndome a la otra vida ni por el momento me interesa la reencarnación (aunque siempre la dejo como último recurso). Señores que dictan las leyes espirituales: tenía en la cabeza algo más a medio plazo...

Llego a la última entrada, y me parece un chiste malo. Se trata de un estudio bastante sesudo que analiza la confianza en el sistema de salud. En tiempos mejores, los doctos investigadores se ganaban la vida llegando a conclusiones como esta: "la buena calidad puede aumentar la confianza del pueblo en la atención de la salud pública". No me lo invento; he citado textualmente.

O sea, que a tenor de la disminución de la calidad va a ser verdad que el futuro cada vez existe menos...

Y eso es todo, fin de la búsqueda. Al menos puedo comunicaros que la confianza en el futuro no está en google. No perdáis el tiempo tecleando la frase. Buscad debajo de la alfombra, entre los visillos, detrás de la tele. La respuesta no está en el mundo virtual.

Quizá ha llegado la hora de dejar de copiar y pegar, y ponerse a buscar la solución en el mundo real. Puede que el camino no se descubra, sino que haya que crearlo. Eso sí, no se os ocurra colocarlo en la comunidad de Madrid, que seguro que nos cobran el peaje.

1 comentario:

  1. Hola!!
    Pues yo iba a decir eso de que lo que de verdad podemos manejar es el presente. Claro que el futuro existe, pero parte de lo que hacemos en cada momento, de tu ahora, que es donde vives.
    La primera pregunta sería: ¿por qué has tecleado "confianza en el futuro"?, ¿qué estás buscando?
    La confianza en el futuro parte de cada momento de mi presente, de cómo gestione mi ahora para que mi siguiente ahora -el futuro- sea como yo quiero. ¿Quiero confianza en el futuro? ¿cómo puedo trabajar para que sea así?
    He dicho. Se aceptan todo tipo de comentarios y debates!!!

    ResponderEliminar